Es una deidad u Orisha que existía mucho antes de la creación del mundo y fue enviado a la tierra por Olodumare (dios) para hacer un equilibrio entre el bien el mal, es el mensajero de Olodumare (Dios), de los Orishas y de los antepasados (Egguns). Es el dueño de los misterios de las cuatro direcciones, del norte, del sur, del este y del oeste, es el guardián de las puertas de la fortuna, del bien y el mal. Eshu-Elegba es lo que para la filosofía oriental, el yin y el yan. Es un concepto fundamentado en la dualidad de todo lo existente en el universo. Describe las dos fuerzas fundamentales aparentemente opuestas y complementarias, se encuentra en todas las cosas.
Antes de realizar cualquier sacrificio a cualquier Orisha, primero debemos apaciguar a Eshu-Elegba, porque él es capaz de interrumpir, al punto de manipular por completo el ritual. Eshu-Elegba es el Orisha más complejo del panteón Yoruba, es el encargado de distribuir tanto recompensas como los castigos a los fieles y seguidores de la religión Yoruba.
Eshu-Elegba es considerado una fuerza espiritual presente en la naturaleza, conocida como Orisha. El primer Eshu-Elegba que recibimos dentro de nuestra religión, al ser consagrado en Orisha o IFA es Eshu Oddara, muy ligado a Orunmila, éste es el Eshu de las transformaciones, lo mismo de bueno en malo que de malo en bueno, pues se necesita una transformación para cambiar el destino de los iniciados.
Seguimos con más información sobre Eshu-Elegba. Espero que disfruten de este video.
“Elegba o Elewa”
Elegba o Elewá es la parte benéfica de Eshu, y su nombre significa príncipe de Gba, esto por la mitológica historia de cuando esta deidad, quien fue un niño príncipe de la tierra Gba que también se le conoce en Nigeria como Ketu, en uno de sus paseos se encontró un coco seco que poseía unas luces internas, se lo llevó a su palacio para mostrarlo a los ancianos, pero nadie le hizo caso y lo dejaron tirado en una esquina. A los pocos días, el niño murió, tanta fue la conmoción de este suceso que los ancianos del Reino decidieron consultar el Oráculo y éste le dijo que la causa de la muerte del príncipe había sido el coco, puesto que su espíritu se fue a vivir en él. Desde entonces, se le adora mediante un coco o una piedra.
Por otro lado, se dice que Eshu se creó solo y vive en la tierra perturbando al ser humano, creándole dificultades de todo tipo, por eso se le pone una ofrenda para evitar que llegue su mala influencia, comparte las características de las deidades positivas y negativas, ya que es el mensajero y mediador entre ambos bandos y el ser humano. Se dice que Eshu es un viejo que vive en la calle y que Elegba es un niño que vive en la casa del que lo posee. Elegba habla por el diloggun (caracol) y su mano de caracoles es la mayor, ya que consta de 21 caracoles o cauries, éste cuenta con 101 caminos, esto quiere decir que existen 101 tipos de Eshu-Elegba.
El collar que representa a Eshu es de color blanco y negro, el de Elewa es de color rojo y negro. Y su número es el 3.
En la naturaleza está representado por las rocas. Su objeto de poder es el garabato. Su día de la semana es el lunes. Se saluda ¡Laroyé elewa!
Los hijos de Elegba o Elewa son inteligentes y hábiles, pero poco escrupulosos. Son habladores y pueden vender hasta lo imposible, si se les deja hablar. Son infieles y poco caseros, les gusta la calle. Se inclinan a la corrupción, el timo, la estafa y las intrigas políticas, lo que les garantiza el éxito en la vida.
Antes de realizar cualquier sacrificio a cualquier Orisha, primero debemos apaciguar a Eshu-Elegba, porque él es capaz de interrumpir, al punto de manipular por completo el ritual. Eshu-Elegba es el Orisha más complejo del panteón Yoruba, es el encargado de distribuir tanto recompensas como los castigos a los fieles y seguidores de la religión Yoruba.
Eshu-Elegba es considerado una fuerza espiritual presente en la naturaleza, conocida como Orisha. El primer Eshu-Elegba que recibimos dentro de nuestra religión, al ser consagrado en Orisha o IFA es Eshu Oddara, muy ligado a Orunmila, éste es el Eshu de las transformaciones, lo mismo de bueno en malo que de malo en bueno, pues se necesita una transformación para cambiar el destino de los iniciados.
Seguimos con más información sobre Eshu-Elegba. Espero que disfruten de este video.
“Elegba o Elewa”Elegba o Elewá es la parte benéfica de Eshu, y su nombre significa príncipe de Gba, esto por la mitológica historia de cuando esta deidad, quien fue un niño príncipe de la tierra Gba que también se le conoce en Nigeria como Ketu, en uno de sus paseos se encontró un coco seco que poseía unas luces internas, se lo llevó a su palacio para mostrarlo a los ancianos, pero nadie le hizo caso y lo dejaron tirado en una esquina. A los pocos días, el niño murió, tanta fue la conmoción de este suceso que los ancianos del Reino decidieron consultar el Oráculo y éste le dijo que la causa de la muerte del príncipe había sido el coco, puesto que su espíritu se fue a vivir en él. Desde entonces, se le adora mediante un coco o una piedra.
Por otro lado, se dice que Eshu se creó solo y vive en la tierra perturbando al ser humano, creándole dificultades de todo tipo, por eso se le pone una ofrenda para evitar que llegue su mala influencia, comparte las características de las deidades positivas y negativas, ya que es el mensajero y mediador entre ambos bandos y el ser humano. Se dice que Eshu es un viejo que vive en la calle y que Elegba es un niño que vive en la casa del que lo posee. Elegba habla por el diloggun (caracol) y su mano de caracoles es la mayor, ya que consta de 21 caracoles o cauries, éste cuenta con 101 caminos, esto quiere decir que existen 101 tipos de Eshu-Elegba.
El collar que representa a Eshu es de color blanco y negro, el de Elewa es de color rojo y negro. Y su número es el 3.
En la naturaleza está representado por las rocas. Su objeto de poder es el garabato. Su día de la semana es el lunes. Se saluda ¡Laroyé elewa!
Los hijos de Elegba o Elewa son inteligentes y hábiles, pero poco escrupulosos. Son habladores y pueden vender hasta lo imposible, si se les deja hablar. Son infieles y poco caseros, les gusta la calle. Se inclinan a la corrupción, el timo, la estafa y las intrigas políticas, lo que les garantiza el éxito en la vida.
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